Los mejillones se ponen en una cacerola con agua lo justo para que los cubra, cuando empiecen a hervir se abrirán. Entonces los apartamos y los separamos del agua. Cuando se enfríen un poco los sacamos de las conchas, les quitamos bien las barbas y los reservamos.
El agua de haber hervido los mejillones la colamos y la reservamos.
Las gambas de tamaño normal las ponemos en una cacerola cubiertas de agua y, al igual que hicimos con los mejillones, se ponen a hervir. En cuanto empiecen a hervir apartamos la cacerola del fuego y dejamos unos minutos. Después las apartamos del agua, que la colamos y reservamos. Cuando se enfríen un poco pelamos las gambas y las reservamos.
Las almejas cuando las compramos las ponemos en agua con sal para que expulsen bien la arena, si es que las traen. Deben estar así al menos una o dos horas. Una vez hecho esto se lavan bien las almejas bajo el chorro de agua, se escurren y se reservan.
Hacemos un refrito con unos dientes de ajo, media cebollita y 2 pimentitos normales con un poquito de aceite en una sartén. Lo ponemos picaditos muy finito.
Mientras tanto vas pelando y picando los tomates y lo pones a la sartén con el pimiento, la cebolla y los ajos que ya estén refrititos un poco y se termina de freir todo junto. Luego añadiendo los mariscos, cuando las almejas comiencen a abrirse, apartamos la sartén del fuego.
En una cacerola grande se pone el caldo de los mejillones y de las gambas. Si vemos que necesitamos más añadimos caldo de pescado preparado. Ponemos también todo el contenido de la sartén del sofrito con las gambas grandes y las almejas.
Cuando empiece a hervir añadimos los fideos y el azafrán.
A media cocción incorporamos las gambas peladas y los mejillones. Los probamos y rectificamos de sal.
Brutal!